Me gusta comprar algo de recuerdo en la feria del Corredor de las Maratones de Sevilla, me gusta la sudadera de este año, la gris sobre todo, pero la talla mediana me esta grande y otras que me pruebo me están ajustaditas, tallaje de mujer imagino, así que, como no soy nada supersticioso, me dirijo al amigo Fernando Chacón y le compro unas pantorrilleras de Compressport amarillas, con las que correría la Maratón, si, no se debe estrenar nada el día de la carrera, pero se que es mi talla perfecta, se ajustan bien, son cómodas y estoy plenamente seguro de que no me pasará nada con ellas.
Me despido de todos, charlo un ratito más con Pepe y Reyes de la situación de Mauri y vamos para casa a descansar, el sábado seguramente estaré más nervioso, me costará más conciliar el sueño y hay que acumular descanso.
Sábado 22 de Febrero, día previo a la Maratón. Me levanto temprano para disponerme a realizar los 20' protocolarios que me gusta hacer antes de las citas importantes, además coincide en esta jornada que la Vuelta Ciclista a Andalucia sale del pueblo (terminará al lado de Fibes a la hora de la comida de la pasta) y no quiero entretenerme demasiado. Me duele la cabeza bastante y me preocupo un poco la verdad, semanas antes en la preparación me paso algo similar y me tuve que pasar el día siguiente en la cama enfermo, no puede ser, ¿me va a pasar esto después de haber estado cuidándome tanto en estos meses...?, hago ese pequeño rodaje con sus progresiones y las sensaciones no son buenas y las pulsaciones son altas, no lo analizo mucho más y me dirijo hacia Fibes para comer con los compañeros del club y los amigos en la tradicional comida de la pasta.
Hoy si, hoy si que se respira Maratón en estado puro nada más entrar en el Palacio de Congresos y Exposiciones, la Feria del Corredor esta repleta de gente, Abel Antón, los atletas de élite, la élite de los populares, maratonianos todos y Jartibles, muchos Jartibles por allí, ahora si que está llegando el momento de la verdad, pelos de punta, mariposas en el estómago, risa nerviosa, inquietud, doctor ¿que tengo?, ¿que me pasa?, saludos, abrazos, amigos, Joaquín, Juan Miguel, Carpe, Gloria... la llegada del día M es inminente, la cuenta atrás ha comenzado.
Comemos en el primer turno, en el de las 13:30, después puede ser complicado.Nos ponemos junto a la banda que está amenizando la comida... demasiado cerca, tenemos casi que gritar para comunicarnos, a lo lejos diviso una larga melena rubia que me resulta familiar, me acerco y si, es Carmen, amiga del bueno de Diego Meca, primera experiencia maratoniana de la chica y de que modo se ha estrenado, todo un placer, no hace falta hablar mucho con algunas personas para ver la grandeza de las mismas...por pequeñitas en tamaño que sean ( es broma ), momentos que te regala nuestra amiga maratón.
Echamos un muy buen rato allí y poco a poco nos vamos despidiendo, es hora de volver a casa, velar armas, dejarlo todo preparado y descansar todo lo que sea posible. Me cuesta conciliar el sueño la noche antes, por ello es incluso más importante el descanso del día anterior. Me sigue doliendo la cabeza pero no lo pienso demasiado, solo llevaría a agobiarme en exceso. Cenamos los hidratos pertinentes pero sin pasarme en exceso, tampoco hay que llegar pesado a la mañana y serán las 22:30 cuando me meto en la cama intentado conciliar el sueño, todo está listo, la ropa preparada, la mochila lista, la estrategia clara, la ilusión a tope y ... el miedo y la incertidumbre como compañera de viaje, como no puede ser de otro modo cada vez que me presento ante ella, ante nuestra querida, amada, deseada, única y especial Maratón, si, cierro los ojos y me visualizo, se como me gustaría que transcurriera todo e intento dormir, tardaría en conseguirlo, pero creo que al menos unas cinco horas conseguiría dormir.
Ahora si, no hace falta que suene ni el despertador (que pongo por si acaso) ni la alarma del móvil, instantes antes de las 6:00 de la mañana me despierto, no me noto cansado, es más, me levanto ágil, con ganas, el dolor de cabeza casi ha desaparecido. Intento hacer los deberes en el W.C., con el par de cafés que me suelo tomar a diario al levantarme es fácil, pero hasta eso he eliminado los días previos, con alguna que otra dificultad pero cumplimos. Desayuno algo, tampoco en exceso, un par de rebanadas de pan con aceite, un poquito de café, una torta de aceite y un poco más tarde 500ml de bebida isotónica.
Me visto de corredor y hace frío, bastante frío, pero las previsiones climatológicas son buenas, incluso algo de calor para lo que me gustaría. No demoro mucho más el momento de coger el coche y llegar a Sevilla, puede que después sea complicado aparcar, casi nadie en la carretera, solo en el coche, yo, mis pensamientos y el creciente nerviosismo de no saber lo que va a pasar. Aparco justo enfrente de la puerta que tienen habilitada como acceso al guardarropa (ésto fué un error ), es temprano aún y sigue haciendo mucho frío, con lo que me quedo en el coche un ratito más escuchando música e intentando liberar tensiones.Poco a poco van llegando coches, son las 7:30 y me dirijo hacia el interior del Estadio para dejarlo todo listo.
Sigue haciendo mucho frío, en las anteriores ediciones podías estar en la zona de calentamiento de los atletas, mucho más resguardado, me pongo las pantorrilleras, los manguitos, la gorra, la banda del pulsómetro, me doy vaselina en las zonas que lo necesitan, me ajusto los cordones una, dos, tres veces...no serán las últimas, en la linea de salida lo volveré a hacer, rituales propios de todos los que estamos por allí, cojo los tres geles que voy a utilizar a lo largo de la carrera, la botellita con isotónica que me acompañará como último recurso por si fuera necesario ( no la abandonaría hasta pasado el Costurero de la Reina), reviso que todo lo que necesito lo tengo y dejo la bolsa del dorsal 1231 en el guardarropa, aunque me dejo puesto una camiseta vieja hasta instantes antes de que se de la salida.
Ya van llegando los amigos, en el guardarropa ya está la tropa Jartible casi al completo, abrazos, miradas, risas, nervios, choque de manos, palmadas, más abrazos...
Me encuentro con Pepe, quiero ver a Reyes antes de salir, saludo a las dos, 08:15...nos encaminamos hasta la puerta del Estadio donde solemos quedar para hacer la foto Jartible de rigor, más encuentros, Pretorianos de Tomares, practicantes del Lento, suave... sin miedo, Sandra, Gloria otra vez, sonrisa eterna, Azucena, Pacual, posamos para la foto, ir y venir, parece que los deberes no los había realizado como debiera, pero no es eso, son los nervios, las mariposas ya no son mariposas, han evolucionado y ya no se ni lo que son, lento caminar, 08:30, es hora de ir al cajón...
Buscamos el cajón correspondiente, nos volvemos a atar los cordones, una vez...no, varias, vuelvo a salir del cajón, si, para eso otra vez, menos mal que lo tenemos fácil, parece que ya los nervios están mas apaciguados, miro para ver si veo a alguien conocido junto a mí, pero no encuentro a nadie. A lo lejos diviso a David Cao en su cajón y creo que Nacho, la música suena con fuerza, hay un instante que no logro recordar bien, se me vienen a la mente imágenes del año pasado, estaba con Mary Anne justo aquí, en el mismo lugar y nos abrazábamos para desearnos suerte, vuelvo a cerrar los ojos por un instante y me vuelvo a visualizar entrando en meta, del modo que me gustaría llegar, ojalá todo ocurra del modo que visualizo.
Y, de repente, el pistoletazo de salida, señores, señoras, comienza el espectáculo de la XXX Maratón Ciudad de Sevilla, suerte a todos y a disfrutar, a vivir apasionadamente cada uno de los instantes por los que vamos a pasar. Los primeros momentos son complicados, mucha gente y es difícil correr con fluidez, tanto es así que después fuimos conscientes de que se produjo una caida de una atleta de élite que fué pisada y que aún así, logro terminar con la nariz rota y bastantes contusiones. Una vez pasados los primeros centenares de metros, conseguimos correr con normalidad, ya no hay nervios, ni tan siquiera tensión, ya solo es dar un paso tras otro. Me adelanta el amigo Manuel Escaño, no, no me adelanta alguien cualquiera, me gusta aprender de los que saben, de los que entienden de atletismo, Nacho Garcia- Filoso, David Bueno en anteriores preparaciones, en esta, me estaba gustando como estaba planificando los entrenos el amigo Manuel, además de que estaba consiguiendo muy buenos resultados, así que me ha guiado en toda la planificación, gracias Inkel, nos saludamos, nos damos la mano, nos deseamos toda la suerte del mundo y lo pierdo en la lejanía entre el mar de corredores.
Todo transcurre con aparente normalidad, estamos por Carlos III y buscamos Ronda de Triana, la estrategia la tengo clara, tengo dos deudas pendientes, en las dos últimas citas con la Maratón no me ha ido bien, pero eso no hace que se rompa mi idilio con ella, todo lo contrario, lo que más deseo es llegar con buenas sensaciones a la parte final de carrera, es duro llegar como lo he hecho yo en las dos anteriores ediciones y si puedo hacerlo mejorando mi mejor marca, pues mejor que mejor, creo que es lícito intentar luchar por ello, eso no significa que disfrute menos que quienes no tienen ningún objetivo con respecto al crono, creo que tenía margen para ello, los entrenamientos los había trabajado en ritmos para que así fuera y me he divertido en la misma, llegará el momento en que esto no sea así, pero ello no rebajará mi amor, mi pasión por esta prueba, eso lo tengo claro. Para ganar esta partida ajedrecista que teníamos la maratón y yo, la estrategía era rondar los 4'30" pero un par de segundos o tres por encima y si, llegado el tramo final me encontraba bien, intentar acelerar el ritmo. Y así transcurren los primeros kilómetros, veo a Jose Luis que está viendo el paso de los corredores y nos saludamos y me desea suerte, nos volveríamos a ver en el km34.
Paseo de las Delicias, por aquí voy acompañado de un amigo del C.A. Guadiamar que ha entrenado en alguna ocasión con nosotros por el Corredor Verde, no recuerdo su nombre, lo siento y nos alcanza el amigo Manuel Medina, le pregunto que quiere hacer y me dice que sobre 3h15, vamos a una media de 4'33-4'34 así que le viene bien, se acopla con nosotros un tiempo pero se encuentra bien de sensaciones y decide irse un poquito hacia delante. La temperatura empieza a subir, ya no hace tanto frío y nos aproximamos al punto km10, hemos pasado Torre del Oro, Maestranza, gran ambiente por aquí y nos dirigimos a Torneo, en el recorrido anterior era complicada esta zona, el señor del Mazo solía aparecer por aqui para castigar a los demasiado valientes o a los osados que se habían atrevido a desafiar a la Maratón del modo menos óptimo, si, a mi llegó a atizarme por aqui...tengo ganas de salir de esta zona. En cuanto a sensaciones voy bien, no me siento fluido al 100% pero estamos todavía en los albores de la carrera, esto hay que tomárselo con mucha calma, me empieza a molestar un poquito el aductor izquierdo, en los últimos maratones es la zona que primero se me ha empezado a cargar, creo que puede ser por una mala técnica de carrera que hace que rote en exceso y hace que trabaje más de lo que debiera, es molesto, pero no algo que repercuta en el ritmo de carrera.
En el km 11 aproximadamente nos encontramos con el amigo Pepe que está tirando fotos allí a todo el mundo, una gran alegría como siempre, me da ánimos y seguimos hacia delante en busca de una zona de la carrera tremendamente espectacular, la zona de La Macarena.
El paso por La Macarena es absolutamente espectacular, se asemeja al paso de las grandes carreras ciclistas por los puertos de montaña, una marea de gente animando y aplaudiendo el paso de los corredores, un plus de motivación para todos, para mi particularmente, el tramo más bonito de la parte inicial de la Maratón. Cronometricamente, seguimos con las mismas pautas, el ritmo medio está entre 4'33-4'34, las pulsaciones no las miro, no lo haría hasta acabada la carrera, me fió de mis sensaciones. El ritmo ya es más fluido que al inicio, más fácil, al paso por el km 15 ya me he tomado el primero de los tres geles que me voy a tomar (km 15, 25 y 35) y la botellita con isotónico me sigue acompañando, en estos primeros puntos de avituallamiento existen botellas de agua, con lo que hidratarse correctamente es fácil, le doy un par de sorbos a la botella y un poco más adelante hago lo mismo, tirando la botella fuera del alcance del resto de corredores.
Nos acercamos a la Media Maratón, el transitar por Kansas City se hace largo, la molestia en el aductor sigue ahí pero se ha estabilizado, el amigo Mariano me ha adelantado ya,y tras de mí, escucho una voz, pero no de ultratumba, sino de gente que estaba muy viva ..."ese José Manuel Espinar, lo vamos a pillar", efectivamente, al poco me alcanza un buen grupito de amigos Jartibles, Diego, Alvaro y Juan, que alegría, que buen grupito podemos formar me digo, a Alvaro pese a su maltrecha rodilla se le ve bien, Diego está muy fuerte y Juan es un todoterreno, me digo, ésta puede ser una muy buena compañía para el resto de la carrera. Seguimos así un rato, pero cada uno empieza a llevar su ritmito, unos se van por delante unos metros, Alvaro se queda un poquito por detrás y entre una cosa y otra y casi sin darnos cuenta, buena señal, no cabe duda, alcanzamos la media maratón, tiempo oficial casi 1h37', por mi reloj 1h36'45", empiezo a hacer cuentas y eso arroja un resultado final si doblamos de 3h13' largos, no está mal, no es mi mejor marca en Maratón pero es un buen registro para mí, las sensaciones son buenas, pienso que la estrategia también y todo transcurre según lo había planteado salvo la molestia en el aductor (con la que, para ser sinceros, ya contaba).
Un par de kilómetros más adelante está Pepe haciendo fotos de nuevo y Reyes, a partir de aquí los avituallamientos dejan de ser en botella para ser en vasos. Le tengo pánico a esto, el desfallecimiento del año pasado fué una suma de circunstancias, empezar la preparación tarde, ir a contrareloj en la misma, forzando al final de ella, debilidad muscular y una mala hidratación en carrera, bebí muy poco de los vasos y eso con mi Hiperhidrosis es toda una pasarela hacia el descalabro. Este año no quería que me ocurriera lo mismo y además de salir con mi botella (del por si....) iba a cogerle a Pepe una botella en este punto y en el Costurero de la Reina otra a Carmen, la mujer de mi compañero y amigo Joaquín, además de beber en cada uno de los avituallamientos de los vasos.
Pepe se encuentra en el lado izquierdo de la calzada y me alcanza la botella, me da ánimos de nuevo, me dice que le eche no se que....testiculina creo que me dijo, me alejo camino de la parte más importante de la carrera.
Hasta aquí, la parte más intrascendente de la carrera, a partir de aquí, los acontecimientos y las sensaciones iban a sucederse una tras otra de un modo simplemente espectacular. Aprovecho para tomarme el segundo gel en el km 25 (he confiado a lo largo de toda la preparación en los productos de Multipower del amigo Ricardo Cabrera) y la verdad es que estoy muy contento en como me ha ido con ellos, para el día M, había confiado en un par de geles que ya había testeado previamente y asimilado sin problemas y para la parte final había dejado uno con cafeina y Guaraná.
El tramo por el que pasamos a continuación, Ramón y Cajal, Eduardo Dato, Estadio Ramón Sánchez Pizjuán, hasta antes de entrar en Manuel Siurot, es el tramo por el que me encuentro menos cómodo, ¿y eso?, si estoy pasando por una zona bastante afín a mi, mi campo del Sevilla, Nervión, empiezo a no sentirme cómodo y como no puede ser de otro modo, los fantasmas de las ediciones anteriores se me empiezan a aparecer con virulencia, estamos en el km 29 ó 30, Juan se ha ido por delante, Diego Rubio va un poco inconstante en el ritmo, unas veces me adelanta, otras se atrasa, otras va al lado mio, el ritmo empieza a decrecer unos segundos, si hasta entonces el ritmo medio se movía en torno a 4'33-4'34, por aqui, se me va unos segundos, por mi derecha me adelanta alguien vestido de verde Bikila que no va corriendo, vuela, parece que lleva prisa, como va el bueno de Rafa Ruiz, que barbaridad. Ciertamente estoy preocupado, las sensaciones no son óptimas, no me siento con falta de fuerzas, pero el ritmo parece que ha decaido con la misma sensación de esfuerzo y no quiero ese padecer de los dos últimos años, el km 29 es rápido, como queriendo recuperar esas sensaciones, pero en el 30, miro el reloj y voy a ritmos cercanos a casi 5', acelero un poco sin cebarme y a duras penas mantengo el 4'50", parece que una vez más, irremediablemente, la maratón y el jaque mate está próximo.
Todo a partir de este punto se multiplica exponencialmente, para la bueno y para lo malo, el tiempo parece ralentizarse. Parece que todo vuelve a la normalidad en cuanto a mi, recupero el ritmo que llevaba, puede ser que al paso por el km 30, el saber que te quedan solo 12, que lo que querías lograr hasta el momento de llegar aquí lo has logrado, puede ser que todo ello me reactivara positivamente. El amigo Mariano en este punto sigue delante, adelanto al amigo Medina que va a buen ritmo no obstante, Juan Ortiz sigue delante y Diego pasa a mi lado, pero poco a poco voy avanzando, algo más adelante me encuentro a Juan caminando, lo ánimo, le tiro de la mano, vamos y se pone de nuevo a correr. A la altura del Costurero de la Reina me espera Carmen con botellas de agua, he seguido bebiendo en cada uno de los puestos a través de los vasos, en algunos con más acierto que en otros, la temperatura ha subido unos grados, hace calorcito, estoy deseando ver a Carmen, de la botella que llevaba con Isotónico desde inicio todavía me queda algo, le he pegado pequeños sorbos a lo largo del recorrido.
Veo a Carmen, cojo la botella de agua, gracias Carmen, aprovecho y le doy los últimos sorbos a mi compañera desde la salida y me adentro en el Parque de Maria Luisa, estamos en el km 33 y... mira tu por donde y quien me lo iba a mi a decir tan solo unos kilómetros atrás, me encuentro con fuerza, con mucha fuerza, vaya contradicción, al paso por el campo del Sevilla me da un amago de pájara y fué pasar el campo del Betis y empezar a encontrarme bien, tal que esas sensaciones ya no me abandonarían de la Palmera en adelante. Me entran unas pequeñas dudas, llegado a este punto y estando con fuerzas, dudo si empezar a dar todo lo que quede desde aquí o esperar un poquito más, el paso de la Alameda de Hércules el año pasado, la subida por Calatrava y todo el Alamillo pesaba demasiado aún y en días anteriores me había convencido de esperar hasta el km 35 y más.
Rodeamos Plaza de España, empiezo a marcar 4'29 en el Garmin, no, no penséis que no estoy disfrutando en este momento por mirar el reloj, todo lo contrario, para alguien al que siempre le ha gustado más los números que las letras, que no se le daban mal las matemáticas, que en los tiempos donde la tecnología todavía no nos había invadido como hoy en día se entretenía en rellenar hojas y hojas de cuadernos con estadísticas quinielísticas en forma de porcentajes, resultados en casa y fuera, resultados con equipos con el mismo comportamiento al que se enfrentaban,tanto es así que alguna vez, de muy pequeño (algún acierto importante en la quiniela tuve), y en nuestra humilde casa entró un buen video de los de entonces y una MTB Scott de lo mejorcito del mercado, que seguía las vueltas ciclistas en la tele y apuntaba los cronos parciales de de las contrarrelojes, para alguien que trabaja con números a diario...os puedo asegurar que ésto no me hace ser esclavo del reloj ni disfrutar la carrera menos que nadie, al contrario.
Justo antes de salir de Plaza de España me vuelvo a encontrar con Jose Luis, al que había visto al principio de la prueba, me ofrece de todo, agua, isotónica,etc, se lo agradezco una barbaridad y me da cosa no coger nada de lo que me ofrece, pero me encuentro muy bien, llevo la botella que me ha dado Carmen hace poco y con la que aprovecharé y me tomaré el último gel que me queda en el km35, nos despedimos, me da ánimos y me dice que estamos en el 34 y que me ve muy bien, otro empujoncito más en forma de motivación hacia la meta. A lo largo del circuito nos encontramos con multitud de fotógrafos y entre ellos muchos amigos, además de Pepe, saludo a Javier Serrano varias veces, Almudena y Jesus, Rosa, Isa, Silvia....y muchos más, gracias a todos por esa labor.
Abandonamos Plaza de España y encaramos la parte más espectacular de la carrera, el paso por el centro histórico de la ciudad, San Fernando, Constitución, Catedral, Plaza Nueva, escucho una voz que me grita, es un compañero de trabajo que ha ido a vernos a los amigos que corremos hoy, que alegría ver a Gregorio allí, puesto km35, allí está Juanma de voluntario y también alcanzo a saludar a Manu Chaparro, miro el crono, 4'30", el ritmo medio sigue marcando en torno a 4'34, eso no da para rebajar mi mejor marca en la carrera, ya hemos conseguido el primer objetivo, el señor del mazo que andaba esperando a los despistados por aquí he conseguido que no me alcance, estamos en los últimos 7 km de carrera, pero todavía me sujeto un poco,poco antes de llegar a este avituallamiento me tomo el último gel, intento mantener la calma ya que siempre se me ha hecho muy larga la zona del Alamillo, por esta zona adelanto a corredores con muchos problemas, un chico empieza a vomitar delante mía, el esfuerzo o quizás no ha asimilado bien lo que ha tomado. Gente muy preparada totalmente acalambrada, la maratón puede ser cruel si te muestra su peor cara, y en esta ocasión, con estos compañeros se estaba ensañando, al igual que con otros buenos amigos que venían detrás, quizás aquí radica también algo de lo que nos atrae de esta prueba, lo imprevisible que puede llegar a ser.
Entramos en los últimos 6km, nos acercamos a la Alameda de Hércules y ahora si que si, decido dar lo que me queda. La animación por aquí es tremenda,el año pasado no era consciente de nada, por esta zona, el amigo Alvaro Montalbo el año pasado, me acompaño durante unos metros al verme tan mal, que caprichoso es el destino, este año ha vivido una maratón muy amarga y el que lo ha apoyado a el ha sido el amigo Diego, todo mi ánimo Alvaro para una pronta recuperación. El sol empieza a notarse, me bebo lo que me queda de la botella, 4'19" en el parcial, empiezo a hacer cálculos rápidamente, con el desfase que lleva el gps con respecto a la medición homologada de la prueba, para culminar ya esta aventura del modo que había visualizado desde el principio tenía que terminar a una media de 4'30-4'31, subo por Calatrava dejando atrás la Alameda, este tramo es en ligera subida, lo afronto bien, con fuerza en las piernas, me digo vamos,vamos, un poco más, un poco más, 4'27 en el parcial, no es suficiente, un poco más...
Atravesamos el Puente de la Barqueta con mucha fuerza, es díficil explicar las sensaciones que llevaba por aquí, en ninguna de las Maratones anteriores había experimentado esta sensación por aquí, si, es lo que quería, es lo que deseaba y es lo que había soñado a mi paso por aquí, nunca se me ha hecho tan corto este tramo, si hay algo cercano al Nirvana tiene que ser esto, las piernas no pesan, no siento cansancio, la respiración no es forzada, ¿es cierto todo esto? o acaso es solo producto de mi imaginación y de todo lo que estoy experimentando al vivir todo lo que había entrenado, planeado e incluso como digo, visualizado instantes antes de la salida. Sigo mirando el crono, cambia de dígito, 4'32 de media, si, puede ser posible, me empiezo a convencer de que puede ser, km 39, parcial de 4'19" de nuevo, puede ser, puede ser.
Estamos dentro del Alamillo ya, sigo exprimiendo lo que me queda en las piernas, hay esfuerzo claro está, pero este esfuerzo es muy agradecido, el esfuerzo en el que le pides a tu cuerpo y este te responde, escucho mis zancadas, pese a la gente que adelanto y a la gente que anima, estoy solo, solo la maratón y yo, solo un objetivo, ver el Estadio, otro kilómetro más antes de llegar a una zona algo cruel, km 40, 4'12" de parcial, fenomenal, no me lo creo, si sigo con esta dinámica lo voy a conseguir. Se divisa el Estadio, pero es pronto aún, todavía tenemos que recorrer algún kilómetro antes de entrar en ese tunel que tanto significa para los maratonianos, el Estadio, se ve pero todavía no es nuestro, el esfuerzo empieza a notarse, tomo algo de aire, km41, 4'19" de parcial , la media de la carrera ya está en 4'31... y con esos números, con esos números estoy en el límite de mejorar mi marca, ¿que si estoy disfrutando?, disfrutando es poco, esto es una experiencia brutal, esto no se me va a olvidar jamás, no voy a ganar la maratón, no voy a hacer una marca estratosférica, no, pero voy a demostrarme a mi mismo y a demostrarle a todos los que tienen un sueño, maratoniano, deportivo o vital, que si lo sueñas, que si lo quieres, que si lo luchas, que si le pones pasión, ganas, constancia, ilusión,trabajo, que si pones todo de tu parte para ello, pero sobre todo pasión en lo que hagas, muy probablemente conseguirás lo que anhelas y si no, no podrás reprocharte nada, habrás puesto todo lo ha estado de tu parte.
Es hora de volver a dar una vuelta de tuerca, el Estadio está ahi ya, si te queda un átomo de fuerza tienes que darlo, km 42, estamos en el km 42 de mi querida Maratón, amiga, este año, este año lo hemos pasado bien, hemos formado un binomio irrepetible, nuestro idilio, nuestros lazos, salen más reforzdos que nunca, tengo unas ganas tremendas de volver a encontrarme contigo, me has dado tanto, me has enseñado tanto cada vez que nos hemos visto, me has regalado tantos momentos, tantas personas únicas, me has enseñado a ser fuerte en el día a día pese a las adversidades, pese a las injusticias, pese al dolor y todo eso, todo eso creo que lo he forjado contigo, si no te hubiera conocido, creo que el camino de mi historia en esta vida hubiera sido totalmente diferente, doy gracias por amarte con la pasión que lo hago.
Km 42 de mi Garmin, pero queda medio kilómetro aproximadamente, parcial de 4'00, estoy emocionado, claro que si, esos números no me ciegan y no me convierten en alguien simplemente racional, todo lo contrario, las emociones se desbordan, entro en el tunel, cuantas veces nos hemos imaginado en el y lo voy a hacer de la mejor de las maneras posibles, bajo por el y entro en el Estadio, no se que decir, no se que escribir, esto....esto solo lo podemos entender los que hemos entrado en los últimos metros de una maratón sean como sean los kilómetros que lo han precedido.
Piso el tartán con fuerza, adelanto corredores por la calle 2, intento mirar el reloj del marcador pero creo que lo he conseguido, todo estaba calculado tan al milímetro...que desde el inicio tenía ganas de seguir "haciendo los deberes", pero como no era una necesidad imperiosa, decidí no parar hasta que se pasaran las ganas. En el transcurso de la carrera también tuve algún amago de molestia estomacal, pero no fué a mas. El aductor, ¿me molestaba el aductor?, no me acuerdo, aquí no duele nada, si acaso el alma de las emociones que estás sintiendo. Alcanzo a ver el crono, veo que va por 3h10' largo, eso con el desfase de la salida al que hay que quitarle unos segundos hace que mi humilde marca, ya digo que eso es lo de menos, que yo me siento ganador cada vez que me calzo las zapatillas y cada vez que estoy en la linea de salida de una maratón me siento como cada uno de los que está ahi, diferente y especial, maratoniano, pues esa humilde marca de 3h11'55" de hace un par de años, después de los sinsabores de las dos ediciones anteriores, iba a conseguir rebajarla y ese era un regalo extra maravilloso a todos estos meses, a este fin de semana y a estas algo más de tres horas en especial.
Silvia Haro, me fotografía, pero no la veo, la animosa familia Jartible y sus Angustias creo que casi ni se percatan de que estoy enfilando la recta de meta, si, esa linea que como bien dice un amigo "tenemos un lugar que mide 195 metros y dura una eternidad... yo voy a intentar volver a el cada vez que pueda"
Este momento no debería acabarse nunca, debería ser eterno y este año me pareció durar tan poquito... adelanto a gente en esta linea pero no me percato de que uno de ellos es mi buen amigo David (Melojero) y es que, como bien dice el, son ya unas cuantas veces las que nos hemos dado un emotivo abrazo tras cruzar la linea de meta, Turdetania, 18 horas irrepetibles con el y con Havié Rosales por Ronda...pero ésta era la primera vez tras una Maratón.
No deseo ni terminar de relatar esta recta final, pero ciertamente, tengo la certeza de que, cada uno de los que ha pasado por aquí, independientemente de si le ha ido como tenía previsto o no, de si la maratón fué agradecida o cruel, todos hemos sentido lo mismo hasta traspasar la linea de meta.
3h 11' 24" de tiempo oficial, una carrera en positivo, con unas sensaciones finales que creo que dificilmente lograré repetir, rebajando el registro en 31 segundos, si, son fríos números, pero tras ellos hay tantas emociones, tanta pasión... no se si lo lograréis entender. Y en meta, el viernes me había cortado el pelo si recordáis y para una mejor aerodinámica además de los manguitos en los brazos, también los llevaba depilados, pero los pelos que quedaban se pusieron como escarpias cuando escuché al bueno de Juan Garrido relatar mi entrada en meta, no se lo que sintió Abel Antón al cruzar la linea de meta en el campeonato del mundo del 99, pero el Nirvana o el misticismo que yo sentí en ese momento, poco le tiene que envidiar, no tengo la menor duda.
Y tras la linea de meta Pepe, ahí estaba él de nuevo con su cámara, no ya solo inmortalizando esos pequeños momentos de todos nosotros, sino felicitándonos, alegrándose por nosotros y animando a todo aquel que por una circunstancia u otra no le fué bien, gracias por todo una vez más Pepe.
Y como digo, el abrazo con mi amigo David y con uno de esos cinco maratonianos que habían completado con anterioridad las 29 ediciones de nuestra Maratón, Julio Molina, XXX Maratones Ciudad de Sevilla, próxima estación creo recordar ....Bostón, creo que tengo de quien aprender a querer a esta carrera...
Saludando al amigo Pepe, enhorabuena por tu labor y felicidades por la carrera de una gran maratoniana, 5ª clasificada Sevillana si no me equivoco.
Charlamos un momento con los amigos y nos adentramos de nuevo en el interior del Estadio, nos colocan la medalla, ayudo a un amigo que está llevando a otro ante las asistencias médicas ya que no se encuenta bien y repongo algo de líquido y de los sólidos que nos ofrecen. Ahora si se nota algo el cansancio, estiro un poco y las piernas no están mal, sin calambres ni molestias importantes. Recojo las pertenencias del guardarropa, me seco y visto allí ya que acceder a las duchas no va a ser posible y me dirijo al coche que está al lado para terminar de vestirme y ver a los compañeros en la salida una vez terminada la maratón, tengo ganas de verlos a todos pero en especial a mi buen amigo Javier Balbuena, veo a muchos, Jesus, Havié, Miguel Aldir, Gloria, Carmen que ha terminado fenomenal, Bermu, Juan, Manolo,Alvaro... y muchos más, pregunto por Javier pero no tengo noticias de el, han pasado más de 4 horas y me apeno un poco, pero solo lo justo, un buen maratoniano y el se que lo es ya que vive esto con la misma pasión que yo, sabe disfrutar de lo vivido pese a que el resultado no fuera el que le hubiera gustado, felicidades por tu capacidad de apasionarte, por tus ganas, por tu ilusión por tu tenacidad, por enseñar valores, por la empatía que transmites, se aprende tanto de personas como tú y tengo la fortuna de conocerte bien y sabéis que es lo que me ha dado dicha posibilidad.... enlazar zancadas e ilusiones y sueños uno tras otro, felicidades.
Momentos compartidos con mis amigos, mis compañeros de club Jartibles, un orgullo pertenecer a ellos.
Como tenía noticias de que salir de allí era complicado y más en la zona en la que había dejado el coche, con los amigos, compañeros de trabajo y compañeros del Guadiamar Juan Escámez y Manolo Castro, nos dirijimos a la grada para ver la entrada de unos valientes, de unos maratonianos con mayúsculas y vemos entrar a muchos amigos, Jose Sosa, Segundo.... y los amigos del Lento, suave...sin miedo, la Guardia Pretoriana en la que es una alegría ver de nuevo a Carmen, se echaba de menos esa sonrisa en las carreras.
Poco a poco se apagaban las luces, las emociones se calmaban y el cansancio de todo lo vivido se apoderaba de este maratoniano, que seguro que no ha sabido plasmar todo lo que ha sentido en este nuevo encuentro con mi amiga Maratón, ya sabes que tu y yo cada vez que nos encontramos sentimos algo tan fuerte e inexplicable entre nosotros, que el tiempo que transcurre hasta volvernos a ver carece de importancia, como en las pasiones que merecen la pena y que si tu quieres, el año que viene y el otro y el otro, volveremos a encontrarnos y quizás no me trates tan bien como este año, pero no me importará, no es mi intención abandonarte, mi amor es fiel e incondicional y si la salud y las circunstancias me lo permiten, me gustaría ser como uno de eso locos que tras 29 ediciones no han faltado a su cita contigo, eso si que es amor, así que, hasta el año que viene, te echaré de menos.
Todo lo relatado se puede resumir en este pequeño video con imágenes de ese fin de semana.
Capítulo agradecimientos, seguro que se me queda alguien en el tintero, así que disculpas de antemano. A mi madre, por estar siempre ahí aunque no entiende que salga a correr casi todos los días, si yo ya estoy delgaó "te hace falta a ti correr.....", para ella que está siempre ahí de un modo incondicional, mi hermano, mi cuñada y dos pequeños motores de mi vida, os quiero tanto que no soy capaz de expresarlo bien, me suele pasar con facilidad.
Me gustaría que algunos de los valores que transmite todo esto se les inculque al verme a mi en esta sociedad que necesita de valores, de herramientas como dice mi amigo Javier que te da la maratón y que va mucho más allá de la carrera en si y del deporte, que nos hace ser dueños de nuestro destino, que nos enseña que no hay cosa que con tesón, esfuerzo y ganas no podamos lograr, que una maratón no es más que la demostración científica de que todo lo puedes lograr, de que lo imposible es lo que no se intenta, y que ser maratoniano es una herramienta para la vida, un PILAR SÓLIDO. Gracias por el apoyo incondicional Javier Balbuena, gracias por enseñarme tantas y tantas cosas, gracias.
Agradecimientos también para mi fisio de cabecera Jose Antonio Salas LLuch y su equipo, por ayudarme a estar a punto y por recuperarme en estos dos años de dos lesiones importantes, una en el tendón rotuliano y otra en la fascia lata, amén de todos los problemas que surgen en una preparación maratoniana y de alguien cuyas cualidades atléticas no son la mejores, ni la ténica ni nada de nada, gracias a vosotros también.
A Pepe por estar siempre pendiente de mi, por preguntarme si estoy bien, si me pasa algo, por ese apoyo constante y por todos los buenos momentos que gracias a él uno puede recordar a modo de fotografía, gracias y ojalá la nacionalización del amigo Mauri Castillo ocurra lo más rápido posible que os lo merecéis.
Aquí tenéis un enlace donde podemos firmar para pedir la pronta nacionalización del amigo Mauri.
Agradecimientos al amigo Manuel Escaño, por ayudarme con los entrenamientos, con las dudas, por aconsejarme en cada paso de los que tenía que dar para llegar con una buena preparación a la Maratón, gracias por todo ello y enhorabuena por tu carrera, se de primera mano como no puede ser de otro modo, que has llevado una preparación modélica y te lo mereces.
Me dejo mucha gente en el tintero, pero esto es ya un poco largo creo, Ricardo Cabrera por asesorarme en cuanto a la nutrición y suplementación óptima con sus productos de Multipower, a todo mi club de los Jartibles que más que un club es una familia, a todos los compañeros del Guadiamar que hemos compartido tantos entrenos por nuestro entorno del Corredor Verde, único y que tantos han tenido la posibilidad de conocer gracias al Gran Fondo del Guadiamar y a todos los que con un me gusta, con una palabra de ánimo, con un comentario de apoyo, me habéis ayudado día a día en la preparación, gracias a todos y seguro que me dejo a alguien detrás.
Tampoco me quería olvidar de todos aquellos que por una razón u otra no han podido participar y les hubiera gustado, a los que os habéis tenido que retirar y a los que, pese a haber sufrido innumerables problemas, como mis dos Alvaros, habéis conseguido finalizar la carrera, felicidades y a todos, espero y deseo que, si queréis, el año que viene tengáis una nueva oportunidad.
Todo esto que he contado lo tenemos aquí en unos, esta vez si, frios números....
OS ESPERO A TODOS EN EL 2015, YO NO FALTARÉ A MI CITA CONTIGO,
SABÉS QUE NO LO HARÉ, NECESITO VOLVER A ESE LUGAR QUE,
MIDE 195 METROS... Y DURA UNA ETERNIDAD...
